UNIVERSIDAD PEGADOGICA NACIONAL
UNIDAD 144
CIUDAD GUZMÁN, JALISCO
LICENCIATURA EN INTERVENCIÓN
EDUCATIVA
Materia:
INTRODUCCIÓN AL CAMPO DE ORIENTACION EDUCATIVA
Trabajo:
MODELO DE PROGRAMAS
Alumna: Elda Fabiola Rivera
Rodríguez
3 B, turno matutino
Profesor guía: Mtro. Yurian
Isaías Ramos Enriquez
Ciudad
Guzmán Jalisco, Mpio. Zapotlán El Grande, 25 de Noviembre del año 2015
Introducción
El
modelo de Programas puede ser conocido también como a la “elaboración de
proyectos de intervención”, tiene gran importancia en el trabajo para los
Licenciados en intervención educativa, y en la materia enfocada a la
Orientación educativa con mayor razón. Es parte fundamental al trabajar en una
situación real, que es parte de las competencias que debe desarrollar el
egresado de la Licenciatura en intervención educativa, el diseñar programas y
trabajar con proyectos.
En
este modelo, las Intervenciones planificadas sistemáticamente que surgen de la
reflexión y el análisis de las necesidades, que se dirigen a la consecución de
unos objetivos, que se encuentran inmersas en el contexto en el que se van a
desarrollar y que son implementados por un equipo de personas (en el que se
incluye el profesional de la orientación) que voluntariamente trabaja en
colaboración, aportando sus conocimientos y recursos y tomando las decisiones
de evaluación.
Para
que se pueda trabajar de forma organizada debe seguirse las fases que se
requieren y a continuación se mencionan:
Fases
del Modelo de Programas
1.
Fase inicial: Análisis del contexto / Identificación de necesidades,
expectativas y potencialidades Contexto del centro -> comunidad Centro
escolar -> organización educativa Aula: procesos de enseñanza y
aprendizaje Alumnos o usuarios
2.
Formulación de objetivos
3.
Planificación del programa Actividades Estrategias Responsabilidades
Recursos Distribución temporal
4.
Ejecución
5.
Evaluación
Con
esto como base fundamental ayuda a la planeación tanto objetiva como subjetiva
de las actividades para las mejoras de la situación intervenida. De allí depende que tenga características
específicas de acuerdo a las necesidades reales a trabajar, y hacerlo de forma
colaborativa capacitando al personal que ayudara al orientador como lo puede
ser los actores sociales, la comunidad y profesionales que se requieran.
Y
como se presenta no es precisamente educativo, se puede actuar en el ámbito
educativo, institucional, comercial etc; siempre y cuando atienda las
necesidades de cada lugar y este bien estructurado; donde sea comprensivo a las
necesidades del mismo con fines preventivos para que atienda de manera general.
Conclusión
Es
de suma importancia entonces realizar o
aplicar el Modelo de programas, que puede combinarse con algún otro modelo que
dentro de él se haya diseñado; conocer la estructura fundamental que debe tener
el programa diseñado en atención a una necesidad detectada de manera general en
el lugar a trabajar, donde sea requerido el hacer un diagnóstico para conocer
la necesidad real, diseñar el programa que solucione o mejore las condiciones
que se viven con ese problema, ejecutar el programa y, sobre todo evaluarlo por
todos los participantes.
La
constante practica que se hace desde el aula de clases desde las exposiciones
al grupo, de forma individual y por equipo, el conocimiento de los elementos de
investigación tanto cuantitativo como cualitativo, el conocimiento de la teoría
educativa y la elaboración de diagnósticos socioeducativos, por el momento son,
solo parte del plan curricular académico
de la licenciatura que se irá incrementando en el transcurso de la
licenciatura, mismos que deben ir desarrollando en nosotros las competencias necesarias
para trabajar en la intervención educativa con el modelo que se requiera, y en
el caso del modelo de programas, como esencial su aplicación al diseñar
alternativas de solución al momento de valorar una necesidad, por ello su gran
importancia.
Se
requiere que el orientador se reflexivo y propositivo, de allí la importancia
que tenga la capacidad y las competencias necesarias para que sean
programadores de soluciones, de acuerdo a las necesidades donde se haga la
intervención u orientación educativa. La observación bien realizada vista de
diferentes perspectivas será más completa para el diseño del programa, y se
debe establecer la meta, objetivos o finalidades de este programa, donde se
presenten alternativas de solución. Es
fundamental el compromiso del orientador u orientadores y las personas
receptoras del servicio, es decir para que el programa diseñado sea efectivo
debe concientizarse a las personas que intervendrán a que participe de forma
activa, sepan de la importancia de su colaboración eficaz y oportuna.
Así,
la fuentes de trabajo son tan amplias como la creatividad del Orientador
educativo las cree, porque puede trabajar no solo en la educación formal, sino
en la informal, y no solo en el ámbito educativo sino en todo lo social,
empresarial, de la salud, institucional, actividades recreativas y culturales y
demás.
Bibliografía
Murillo,
2002, Universidad Autónoma de Madrid
Bien hecho, muy interesante tu conclusión y con mucha relación al tema, Calif. 10
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